Las
células sanguíneas: eritrocitos, leucocitos, plaquetas y células
endoteliales, así como las proteínas plasmáticas poseen características
genéticas y una conformación particular del ADN que difiere de un sujeto
a otro. Estos son conocidos como marcadores genéticos. Su comprensión
es fundamental y tiene relevancia clínica en relación a las
transfusiones sanguíneas y la incompatibilidad ABO y Rh entre la madre y
el feto.
En 1900, el médico austriaco Karl Landsteiner observó que al mezclar sangre de dos personas, en algunas ocasiones se aglutinaba formando grumos visibles. Analizó 22 muestras de sangre humana, incluyendo la suya. El resultado final fue el descubrimiento de 3 tipos diferentes de eritrocitos a los que denominó A, B y O según daban diversas reacciones de aglutinación.
En
1902, Alfredo de Castello y Adriano Sturli, discípulos de Landsteiner,
analizaron 155 muestras de sangre humana, descubriendo un cuarto tipo de
sangre, carente de aglutinación a la que llamaron AB.
En
1908, Epstein y Ottenberg sugirieron que los grupos sanguíneos son
hereditarios. En 1910, E. Von Dugern y L. Hirzfeld descubrieron que la
herencia de estos grupos se realizaba siguiendo las leyes de Mendel con
un patrón dominante para los tipos A y B.
En
1940, Landsteiner y Alexander Salomon Wiener descubrieron otro antígeno
de superficie en los hematíes, al que denominaron factor Rh. Este
nombre obedece a su hallazgo en el mono de la india llamado Macacus rhesus.
Sistema ABO
Los
glóbulos rojos poseen marcadores de superficie o antígenos que les
caracterizan y permiten que les clasifiquemos en 4 grupos: A, B, AB y O.
Los grupos A, B y AB representan a los individuos que poseen los
antígenos A, B y ambos respectivamente. Los sujetos del tipo O no poseen
ningún antígeno.
Cada grupo tiene la capacidad de reaccionar contra los anticuerpos contrarios a sí mismos.El grupo A reacciona contra el tipo B, el tipo B reacciona contra el tipo A. El tipo AB no reacciona contra ninguno de los dos y el grupo O reacciona contra el tipo A, B y AB.
Cada grupo sanguíneo tiene su genotipo y su fenotipo, siendo el genotipo el resultado de la combinación de los genes de los progenitores y el grupo sanguíneo el fenotipo. La herencia de los grupos sanguíneos se realiza de forma autosómica, siendo los tipos A y B dominantes y el grupo O recesivo.
Como
los grupos A y B son dominantes, se expresarán a la vez en sujetos que
heredan el tipo A de un progenitor y el tipo B de otro, fenómeno que se
denomina codominancia. El resultado será un sujeto de sangre tipo AB.
Los genotipos y fenotipos para cada grupo sanguíneo son los siguientes:
Sistema Rh
Con
relación al sistema Rh, el grupo sanguíneo está codificado por dos
lugares o locus estrechamente ligados denominados D. Se relaciona con la
incompatibilidad Rh y la enfermedad hemolítica del recién nacido. A
diferencia del sistema ABO, donde hay muchos 7 genotipos y 4 fenotipos
posibles, en el sistema Rh sólo hay tres genotipos para dos fenotipos
posibles.
Se
tiene el factor Rh o no se tiene. Dado que el factor Rh es dominante,
siempre se manisfestará, ya sea que se herede de forma homocigota o
heterocigota. Se es Rh negativo cuando se carece del factor Rh.Cuando
combinamos ambos factores, obtendremos 8 tipos de sangre diferentes: A
Rh +, A Rh -, B Rh +, B Rh -, AB Rh +, AB Rh -, O Rh + y O Rh -.
Transfusiones Sanguíneas
Transfusiones Sanguíneas
Una
transfusión es la administración de tejido sanguíneo procedente de un
donante compatible a otra persona. Puede transfundirse sangre total,
concentrado de glóbulos rojos o paquete globular, de plaquetas o
granulocitos, plasma y/o sus componentes.
La
primera transfusión humana exitosa la realizó Jean Baptiste Denis en
1667, cuando administró sangre de carnero a una persona sin observar
ninguna reacción postransfusional. En otra oportunidad, administró
sangre de ternera a una joven para calmar su estado de agitación,
causándole la muerte. Aunque fue exonerado por los tribunales, se
prohibieron las transfusiones sanguíneas.
En 1873 y 1874, Landois y Ronfick, respectivamente, advirtieron acerca de la incompatabilidad de sangre entre especies.
La
terapia transfusional puede requerirse cuando es necesario mantener o
restaurar un volumen sanguíneo adecuado para prevenir o combatir el
shock hipovolémico, para mantener y restaurar la capacidad de transporte
de oxígeno de la sangre y para reponer componentes específicos de la
sangre, como proteínas plasmáticas o células sanguíneas cuyo déficit
produce manifestaciones clínicas.
Para
llevar a cabo una transfusión sin poner en riesgo la vida del paciente,
es imprescindible que los grupos sanguíneos del donante y el receptor
sean compatibles, de lo contrario el paciente puede morir por una
reacción postransfusional fatal.Con relación al sistema Rh, una persona
Rh + puede recibir sangre tanto de una persona Rh positiva como de una
persona Rh negativa, pues al tener el antigeno no presentará ningún
efecto adverso.
En el caso del sistema ABO, el grupo sanguíneo AB, al poseer ambos antígenos, puede recibir sangre del grupo A y B, así como también del grupo O, carente de ellos. Por eso se le llama receptor universal, pero no puede donar a ningún otro grupo pues O tiene anticuerpos anti-A y anti-B. El grupo O, al carecer de antígeno A y B, y tener anticuerpos antiA y anti B, no puede recibir sangre de ningún tipo que no sea O. Sin embargo, como carece de antígenos puede donar a todos los grupos sanguíneos por lo que se ha denominado donador universal.
En el caso del sistema ABO, el grupo sanguíneo AB, al poseer ambos antígenos, puede recibir sangre del grupo A y B, así como también del grupo O, carente de ellos. Por eso se le llama receptor universal, pero no puede donar a ningún otro grupo pues O tiene anticuerpos anti-A y anti-B. El grupo O, al carecer de antígeno A y B, y tener anticuerpos antiA y anti B, no puede recibir sangre de ningún tipo que no sea O. Sin embargo, como carece de antígenos puede donar a todos los grupos sanguíneos por lo que se ha denominado donador universal.
Los grupos A y B sólo pueden recibir sangre de su mismo tipo y del tipo O, pero pueden donar al tipo AB y a su mismo tipo.En la siguiente tabla veremos la compatibilidad de los grupos sanguíneos combinando los factores Rh y ABO.
COMPATIBILIDAD GRUPOS SANGUINEOS
| ||
GRUPO
|
DONA A
|
RECIBE DE
|
A+
| A+, AB+ | A+, A-, O+, O- |
A-
| A+, A-, AB+, AB- | A-, O- |
B+
| B+, AB+ | B+, B-, O+, O- |
B-
| B+, B-, AB+, AB- | B-, O- |
AB+
| AB+ | Todos + y –. Receptor universal |
AB-
| AB+, AB- | Todos - |
O+
| Todos + | O+ y O- |
O-
| Todos + y –. Donador universal | O- |
Es
importante notar que lo recomendable es que la transfusión sea del
mismo grupo sanguíneo del receptor y que se haga una prueba de
compatibilidad denominada comúnmente cruce. Esto se debe a que no sólo
los antígenos de superficie de los glóbulos rojos pueden causar una
reacción antígeno-anticuerpo sino también algunos componentes
plasmáticos.
Incompatibilidad Rh Materno-Fetal: Eritroblastosis Fetal o Enfermedad Hemolítica del Recién Nacido
Si
un hombre Rh + y una mujer Rh negativo tienen hijos, el porcentaje de
probabilidades de tener un hijos Rh + dependerá de si el hombre es
homocigoto o heterocigoto para este factor.
| |||||||||||||||||||||||||||
Si
el hombre es homocigoto, el 100% de los hijos será Rh positivo. Si es
heterocigoto, el existe un 50% de probabilidades en cada embarazo de
tener hijos Rh + y 50% de probabilidades de tener hijos Rh -.
Durante
el embarazo, muy poco eritrocitos fetales atraviesan la barrera
placentaria. Durante el parto, con el desprendimiento de la placenta,
una gran cantidad de eritrocitos penetra en el torrente circulatorio de
la madre, estimulando la producción materna de anticuerpos anti-D,
especialmente IgG. Estos anticuerpos persisten en la circulación materna
por mucho tiempo.En algunos casos, la sensibilización obedece a una
transfusión, aborto previo de un embrión o feto Rh +, preclampsia,
hipertensión, placenta previa, drogradicción IV, embarazo ectópico,
amniocentesis, entre otros.Con el nuevo embarazo, los anticuerpos
maternos anti-D de la madre, penetran a la circulación fetal,
destruyendo sus eritrocitos. Esto se traduce en anemia severa, aborto
espontaneo y óbito fetal.
Si
el feto logra sobrevivir, los anticuerpos maternos circulantes en el
feto siguen destruyendo los eritrocitos, produciendo una acumulación de
bilirrubina que le da una apariencia ictérica (amarillenta). El depósito
de bilirrubina en el cerebro produce daño y parálisis cerebral, dando
como resultado la encefalopatía por hiperbilirrubinemia o Kernicterus.
Puede ocurrir también retraso mental, sordera, hidropesía fetal (edema o
hinchazón generalizada), cardiomegalia (aumento del tamaño cardíaco),
hepatomegalia (aumento del tamaño del hígado), ascitis (retención de
líquidos en el abdomen), esplenomegalia (bazo aumentado de tamaño),
derrame pleural (presencia de líquido en el espacio pleural, alrededor
de los pulmones que les impide funcionar adecuadamente), sindrome de
distrés respiratorio y finalmente la muerte. Este cuadro clínico se
conoce como eritroblastosis fetal o enfermedad hemolítica del recién
nacido.
El
tratamiento es la exsanguinotransfusión. Este es un procedimiento que
consiste en el cambio de sangre al bebé. Se realiza un cambio de sangre
al recién nacido, administrándole sangre de su mismo tipo ABO pero Rh
negativa. De esta manera se eliminan los anticuerpos maternos,
evitando así que sigan haciendo estragos en el neonato. Luego él
producirá su tipo de sangre correspondiente, pero no será agredido
debido a que los anticuerpos maternos circulantes han sido
eliminados.
Es muy importante que la madre conozca su tipo de sangre y la de su pareja. Para prevenir la incompatibilidad Rh, de existir la condición de que padre sea Rh positivo y la madre Rh negativo, es preciso que durante cada embarazo o en las primeras 72 horas después del parto, la mujer reciba una inyección de inmunoglobulina anti-D compuesta por anticuerpos anti-Rh que destruyen los eritrocitos fetales en la circulación materna, antes de que se produzcan anticuerpos maternos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿Qué opinas?